Diseño
Hablar de la historia del automovilismo es hablar de la icónica librea de Gulf y de su implicación en las carreras desde la década de 1930.
Sus coches ganadores y sus pilotos legendarios están grabados en la memoria de todos los aficionados.
Para el proyecto Gulf Motion, nos hemos inspirado en 6 modelos para conmemorar los mayores hitos de Gulf y traerlos al presente de la forma más innovadora y moderna.
Cada uno de estos vehículos cuenta una historia. ¿Te gustaría escucharla?
1938
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MILLER GULF SPECIAL
El origen, el punto de partida donde todo comienza. Este fue el primer coche patrocinado por Gulf en la legendaria cita norteamericana. Aún sin los colores corporativos, marcó un hito en la entrada de Gulf en el patrocinio de las competiciones. Aunque no alcanzó la victoria, su participación sentó las bases del legado permanente de Gulf en el deporte del motor. Este coche representa más que una mera presencia en la pista; simboliza las etapas iniciales del glorioso viaje de Gulf en el mundo de las carreras.
1964
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FORD GT40
Sin duda, el tándem más exitoso y uno de los momentos cumbre de Gulf en el motorsport. La primera victoria bajo los colores de Gulf en la mítica carrera de resistencia: las 24 Horas de Le Mans. En 1968, Pedro Rodríguez y Lucien Bianchi fueron los primeros en cruzar la meta a bordo del FORD GT40. El resto es historia del motor: la rivalidad Ferrari vs. Ford en los años 60 se saldó con cuatro triunfos para el equipo americano, dos de ellos con la librea Gulf. Este legendario modelo debe su nombre al acrónimo “Grand Turismo” y a la altura total del coche (40 pulgadas), su motor V8 y una pintura histórica que nunca podemos olvidar.
1968
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PORSCHE 908
Una vez más, un Porsche ganador en la historia de Gulf Motorsport. Este modelo está indiscutiblemente ligado a la mítica Targa Florio, una de las carreras más antiguas y famosas del mundo, celebrada en Sicilia, donde en 1970 logró la victoria con sus característicos “flechas”. Su piloto, el suizo Jo Siffert, al frente del equipo de Brian Redman, hizo historia en una prueba célebre por su peligrosidad y dificultad.
1970
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PORSCHE 917K
El Porsche 917K Gulf es uno de los coches de competición más emblemáticos de la historia, y su versión “Kurzheck” (cola corta) se diseñó para maximizar la estabilidad y la velocidad punta en Le Mans. Bajo sus llamativos colores azul y naranja, este bólido montaba un motor bóxer de 4.5 litros que desarrollaba más de 600 CV, permitiéndole superar los 360 km/h en recta. Pese a su brutal potencia, el trabajo en chasis y aerodinámica—con su alerón trasero optimizado y la carrocería acortada—lo convirtieron en una máquina sorprendentemente manejable en curvas. En la edición de 1970 de las 24 Horas de Le Mans, los Porsche 917K Gulf consiguieron un histórico doblete (primer y segundo puesto), cimentando su leyenda. Hoy sigue siendo un icono de la fusión entre ingeniería puntera y diseño atemporal, un coche que encapsula la esencia de Gulf en la pista.
1994
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PORSCHE KREMER K8
Sin duda, un coche de la historia más reciente en competición. Tras casi 20 años de ausencia de los colores Gulf en las pistas, su regreso llegó con el PORSCHE SPYDER K8 KREMER. El reto era patrocinar a Derek Bell para igualar el récord de Jacky Ickx de seis victorias en Le Mans. ¿El coche? Este Porsche adaptado con la legendaria librea azul y naranja de antaño. Bell consiguió un meritorio sexto puesto en el famoso circuito de La Sarthe.
1995
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MCLAREN F1 GTR
McLaren es otra marca con la que Gulf comparte buena parte de su éxito deportivo. Este modelo, diseñado por Gordon Murray como la “máquina definitiva” para carretera, nunca estuvo pensado en un principio para competir. Sin embargo, pronto se le convenció para adaptarlo y fabricar varios ejemplares para la temporada 1995. La calidad del coche de calle era tal que apenas hizo falta modificarlo para convertirlo en un deportivo ganador. El éxito no tardó en llegar: en las 24 Horas de Le Mans de 1995, el GTR logró el 1.º, 3.º, 4.º y 5.º puestos, así como la velocidad punta más alta de ese año, 281 km/h (177 mph). Sin duda, una pieza imprescindible en nuestro proyecto.
